Otro edificio que encontramos entre de Villa Sofía y la casa de las Jaquecas es Villa María, no es nada parecido a los otros edificios de la zona. Se puede observar en la fachada cierto aire europeo, con características que se pueden acercar a la arquitectura tradicional inglesa. Es un edificio que proyecta Saracibar para sí mismo en el año 1900, por lo que resulta curioso que utilice este estilo tan sobrio, teniendo en cuenta otros de sus trabajos. Puede que quisiese demostrar su versatilidad al realizar este proyecto, y se acerque un poco más al estilo menos decorativo de Vitoria. Durante un tiempo, este edificio estuvo habilitado como clínica por los doctores Ortega y Gómez de Arteche. Luego se abandona y entra en decadencia.
En 1988, se decide rehabilitar el edificio. El edificio se encontraba abandonado, y a causa de ello muchas partes habían sido derruidas. Por esto, en 1988, la Caja de Ahorros Municipal, que parece ser es propietaria en ese momento, pretenderá realizar las obras en limpieza y desescombro en edificio y parcela anexa, para efectuar mediciones y proyecto técnico de rehabilitación.
La intención será destinar la sede de la Fundación Sancho el Sabio a esta antigua vivienda. Esta última obra de rehabilitación no ocurre, ya que además la Fundación nunca ha permanecido en esta edificación.La siguientes rehabilitación con los que nos topamos pertenece al Colegio de Abogados de Álava y datan de los años 90. Esta si se lleva a cabo y llega hasta nuestros días, siendo el actual colegio de abogados de Alava.
Entre la gente de mi generación esta era conocida como la casa del medico que estaba abandonada hacia muchos años. Aparte de las correspondientes historias de terror y niños desaparecidos, había quien afirmaba que en el sótano de la casa había tarros con cerebros y otras partes humanas. ¡Que tiempos aquellos! ¡Imaginación al poder!